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Resumen
El problema del materialismo es ampliamente reconocido como una fuente de descontento en la civilización industrial. A la misma vez, la producción en masa y la tecnología moderna son tambien reconocidas pues proveen un nivel deseable de salud, educación y comodidad física. El reto es poder desarrollan formas creativas y satisfactorias de vivir en una sociedad de producción y consumo en masa. Aprender a tratar apropiadamente con los productos materiales es importante para vivir de acuerdo con los principios Bahá’ís sobre el crecimiento espiritual individual. Entender las dimensiones simbólicas de los productos, a través de aclaraciones antropológicas y psicologicas, nos provee una manera de manejar nuestras posesiones hacia este fin. Objectificación—el proceso a través del cual las cosas físicas son imbuidas de significados en un contexto especifico socio-cultural—es un concepto clave en este entendimiento. Objectificación puede producir alienación, en el sentido Marxista, pero, usada apropiadamente, la capacidad de los objetos de llevar significado tiene el potencial de ayudar al individuo en su crecimiento personal. El reconocimiento de la dimensión simbólica de los objetos es particularmente crítico en capacitar al individuo a esmerarse por desarrollar el desprendimiento en sociedades sumamente materialistas.
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Derechos de autor 1989 Lin Poyer
